Museo del Agua de Lleida
La cuenca del Segre y las Nogueras, potencial hidroeléctrico
L’energia hidroelèctrica.
Grupo hidráulico expuesto en el Museo del Agua de Lleida |
La energía hidroeléctrica se basa en la producción de electricidad utilizando el agua como materia prima. Por tanto, usa una fuente renovable para producir energía, que la convierte en un sistema de producción de los más limpios. No obstante, no es inocua, ya que la construcción de embalses para regular el caudal de agua implica un impacto en los cursos fluviales.
Su funcionamiento se fundamenta en el aprovechamiento del agua para generar corriente. La clave está en convertir la energía potencial en energía cinética, y esta en energía eléctrica. El agua se transporta desde los embalses y canales por tuberías forzadas hasta la central. Estas tuberías están controladas por válvulas que regulan el caudal de agua que debe entrar, en función de la producción eléctrica deseada.
Grupo hidráulico expuesto en el Museu de l’Aigua de Lleida
El agua llega a las turbinas, que son la pieza que convierte la fuerza del agua para producir la energía cinética, mediante un movimiento rotatorio. Fundamentalmente se usan dos tipos de turbinas: la Francis i la Pelton. Las turbinas tipo Francis están indicadas para las centrales que se alimentan de grandes caudales de agua pero sus saltos son de tamaño pequeño o mediano. En cambio, las turbinas Pelton se usan para las centrales con grandes saltos de agua pero pequeños caudales.
Las turbinas están conectadas con los generadores, que convierten esta energía en electricidad. Los generadores se encuentran habitualmente sobre las turbinas. La electricidad producida es una electricidad desordenada y con diferentes tensiones. Un transmisor y un equipo de alternadores son los encargados de transformarla en electricidad comercial. Cuando el agua ha sido turbinada, sale por el canal de desguace y vuelve al río, donde podrá ser utilizada otra vez para producir electricidad.